Melinda y Melinda

Woody Allen, bien por algún motivo, estos últimos días suena la campanita de Woody Allen, supongo que se debe a la grabación de su nueva película en Barcelona es posible. La cuestión es bien distinta y radica en esta antepenúltima película suya: Melinda y Melinda, en toda su esencia. Tenemos a dos Melindas, algo así como un ego y un alter ego, en el sentido alternativo de la palabra. Y también tenemos a la vida que tanto nos gusta personificarla. Drama o comedia, Melinda o Melinda, quizá la clave esté en la conjunción. Comedia y Tragedia, las dos máscaras de la vida, y las fibras de estas máscaras están tejidas por la propia esencia de todo que así brutamente podemós resumir como, el orden y el desorden. Pero eso está ya muy discutido, pero que hay del Drama, pero el Drama como uno más en la família de la Comedia, la Tragedia y el Drama. Nuestra quintaesencia creo que es fundamentalmente Dramática, al menos la mía, y bien es cierto, nunca es bueno generalizar. Peligro, incertidumbre, coraje y triumfo... o agonía. En un momento hemos vuelto a la Tragedia y a la Comedia. Muerte al Drama.