Idea para continuar una novela:
Es absudro buscar el absoulto en lo particular cuando lo absoluto nació de un particular. No podemos particularizar la belleza en alguien porqué sólo lo conseguimos a trozos, a pedazos y no podemos coser el amor, la belleza, la pasión, la costumbre, las palabras, la vida, las casualidades, los ratos, las esperas, las tensiones y pretender obtener una muñeca de trapo que no queme en las brasas. Los pensamientos después del sexo nunca son buenos. Una muñeca de trapo. Me jodiste bien, me jodiste bien para toda la vida, y jodiendo no voy a arreglarlo. Nunca fue bueno pensar después del sexo.
Volví de mis quehaceres que me dan de comer a eso de pasada la hora antes del anochecer; la dama se quedaría de blanco unos días al parecer esta vez, siguiendo el camino de siempre me detuve de nuevo dónde antes; esos hombres arañados por los inviernos habían montado en unas horas un carroussel, era humildemente pequeño, sin carpa, pero infantilmente hermoso. La curiosdad mató al gato que se va por los tejados en las noches de Sabina sin perejil en la comida. Una vez más y sólo una: bendita ca-sua-li-dad. Me acerqué a uno de los mecánicos y le pregunté qué de cuando era eso, solto una voz carraspeada a su compañero, pasaron del sesenta al cuarenta y cinco. Entonces me dí cuenta de que probablemente fuera un carroussel para los niños ricos de Berlín (algo en mí mira de reojo a mi izquierda), un carroussel nazi, no puede ser otra cosa, ¿qué explicaría sinó que los caballitos fueran substituidos por pequeños misiles? Sí claro (una chica, un misterio), había que enseñarlos al futuro del IIIr Reich lo que debían meterse entre las piernas para governar (Miel en los ojos, tinte rubio en el pelo, pecas caídas entorno la nariz, y qué nariz. Ligeras mejillas redondeadas, empolvadas de une vergüenza entre rojiza y carnosa, más bien baja, cuerpo fino, esbelto, manos de pianista, bufanda, gorro, abrigo, negro, negro, negro y el resto era blanco. Estaba el blanco y luego estaba ella. Tanto el blanco y el negro pueden ser la combinación de todos los colores dependiendo de la naturaleza de estos; pero esataba equivocado. Sólo era ella en semejanza, así como el hombre a Diós) al mundo.
Se giró. Se fué.
No hay comentarios:
Publicar un comentario