Erratas Advertidas

tuc, tuc, tuc, clac;

"¿Diga? Si, no, no, el jefe no está, ¡si claro! Por supuesto que se que pregunta por M. Eh, no me temo que no podrá hablar con él. ¿Mañana? Tampoco. No. No. Lo siento, va a estar muy ocupado, sí, sí incluso para usted, no, no hay exepciones. M. no se puede poner, le digo que no, que es imposible. ¿Que quién se encarga de esto entonces? ¡Pues nadie! Yo sólo me dedicó al mantenimiento... Exactamente, eso significa que no va a poder usted pasarse por aquí, ¿que cuánto tiempo? Pues todo el mes de junio, más o menos. ¿Que si se pasará algún dia? Pues no lo creo sinceramente, creo que lo mejor que puede hacer es dejarse caer por aquí a finales de mes, si, al final de la última semana. ¿Que si le sucede algo a M.? ¡Qué le va a suceder! Hombre de acuerdo útlimamente no era la alegria de la huerta, pero ya se le pasará, por supuesto. Bueno, le voy a ir dejando que tengo que terminar de barrer esto y cerrar con candado. Eso, eso, venga, claro, si si, fantástico. De nada hombre, no se merecen, venga adiós."

tu tu tu, tu tu tu, tu tu tu...

La Mala hora

Casualmente es el título de un libro de García Márquez no siendo con una referencia la mejor manera de ponerse a escribir. ¿Qué es la mala hora? Pues esta, la que vivo ahora. A través de la cual escribo. En el sistema horario GMT+1 vendrían a ser las 15:00 y sus alrededores, el mediodía de Zarathursta supongo. La Mala hora. Es una especie de Zénit o de Nádir, según como se mire. En mi caso, y en el de muchos otros, marca una línea divisoria, es la hora del tiempo perdido y la hora en la que se transita entre la mañana y la tarde, el problema es que su pasar está marcado por un símbolo muy alto e inalcanzable para el ser humano; el mediodía, el sol en su punto más alto, al que siquiera podemos permitirnos el lujo de mirarlo.

Hay otra transición durante el dia, si exceptuamos por supuesto el despertar y el acostarse. Se trata del ocaso, como un pequeño símbolo del que gozamos todos los días, la palabra en sí lo lleva implícito pero siempre es más kitsch hablar del ocaso de los dioses, del dios, del Sol. Notese que solo lo último lleva mayúscula. ¿Podrán creerlo? Esta mañana he leído en cierto periódico que "el sol no fue diseñado para la vida", atribuyendo al azar que tengamos nuestro planeta dónde lo tenemos. ¿Acaso sería poético lo contrario?

Bien el ocaso, la transición, ¿por dónde iba? sí. Decía que la otra transición no es notoria, en "la mala hora" ecuador del día el mundo no está en trance y sin embargo sí los individuos, en países como el nuestro (siento una repulsión a poner nombres propios cuando intento hacer un poco de literatura) se escenifica con un sueñecillo. Sin embargo el ocaso, otra transición del día, quizá por estar atribuido a lo dioses si tiene una espectacular, bella y invencible expresión artística y hasta poética de la naturaleza (a través de la incidencia de los rayos solares en las partículas de nuestra atmósfera). Qué injusta es la naturaleza.

Recuerdo un día en clase, estábamos en primera fila con un compañero, le señalé al cielo haciéndole notar el escpectáculo del crepúsculo, los dos lo miramos y estábamos en una clase de esas "dónde se aprende geometría" como dicen algunas paredes. El profesor nos miró, miró a la ventana y solemne, pronunció: "¿De qué se sorprenden? La puesta de sol es un espectáculo que se ha sucedido de forma ininterrumpida en la tierra des de hace varios cientos de millones de años

Un trance a padecer

"¿No es mi trance el mismo que padecen tantos contemporaneos míos? ¿Conseguir que una sola y unica mujer satisfaga todas sus exigencias?"

Un día de estos vas y te presentas a un dective privado; desesperado. Te han amenzado, sí, de delatarte; te han pillado con una de esas furcias a las que has pagado, joder, ¡la intelectualidad a veces se tiene que comprar! Estas desesperado, si no haces una entrega generosa de billetes, tu mujer lo sabrá ¿Cómo reaccionará cuando se de cuenta que has mantenido conversaciones existencialistas con otra? Que has discutido sobre Rabelais y el arte de la novela. Que has discutido acerca de la dualidad del hombre y del eterno retorno. Seguramente no podrá soportarlo. Además, te acusará de haberlo hecho con una jovencita recién licenciada... o quizá ¡Ni siquiera eso! "¡Como has sido capaz sucio asqueroso de llevarnas a nuestro café preferido!". Y es lo que tiene que una sola y una única mujer no satisfaga todas nuestras exigencias.

Conozco un caso (patológico) que reza como sigue; un amigo mío, cirujano plástico, estaba felizmente casado con una mujer que satisfacia sus inquietudes existenciales libres de sujetivismo y no requerentes de soledad, tenía además, por lo que él afirma, un físico más que agradable. Sin embargo, tenía un gran defecto, que a partir de cierto día le imposibilitaron de gozar con ella sus vidas sexuales; una noche, bajo la tibia luz de la luna, vio en el rostro de su amante, en su perfil bueno, el recuerdo de su tía Ágata, a partir de ese momento le fue imposible de sentirse excitado de nuevo por su mujer. Buscó y encontró: una mujer cuyo físico desproporcionado había provocado que la tendencia del mundo al equilibrio de la energía tuviera un intelecto un tanto deficiente. Mi amigo tuvo una aventura con esta mujer (recién licenciada) y la convirtió en su amante. Mi amigo, que era una persona mucho más decente de lo que desprenden estas líneas terminó por no soportar su situación, de modo que encontró en su profesión la solución perfecta; con un poco de cloroformo en un pañuelo, dejó inconscientes a las dos, las llevó a la consulta, y trozeando el cuerpo de su mujer y hechándolo el río hizo lo propio con el cerebro de la otra, el consciente de su mujer al verse en tal maravilla de cuerpo acepto la nueva situación sin siquiera preguntarse nada y atribuiéndolo a un milagro de la naturaleza. Y sin embargo, al poco tiempo, mi amigo volvió a sentirse atraído por otra mujer, recién licenciada. En ese momento decidió coger unos patines y dedicarse a recorrer el retiro de arriba a abajo tocando una trompeta y vestido sólo con mallas rosas.

A todo esto, otro amigo mío, está vez con nombre y apellido aunque por su voluntad mantendremos aquí su anonimato añade a modo de reflexión sobretodo a lo que se refiere las dos primeras frases del artículo: ¿Quién dice que el narrador sea perfecto? ¿Quién dice a él, que él satisface todas las necesidades que tiene su pareja? El mundo no orbita alrededor del ombligo de uno mismo. Seguro que su pareja también puede hacer un artículo gracioso explicando que "No es grave, sólo bajo los ojos, con cierto tono de luz...". La solución: No significa que sea imposible amar sin mentir, si no todo lo contrario, amar a quien te ama a pesar de los defectos de una mismo y por qué no, tomandolos como esas pequeñas cosas que comparten una persona y otra. Esta teoría puede llegar a ser peligrosa y que nos lleve al conformismo absoluto y eso nos deja de ser bonito. La idea principal es no hacer una obsesión de una tontería y dar fuerza a muchas otras cosas que de verdad importan. A veces, todos perdemos el rumbo, pero no significa que ya no vayamos a llegar a nuestro destino. Sólo hay que recrodar, meditar un poco y veremos que un tropezón no deshace toda una jornada de camino.

Ha dicho. Quería añadir yo, que un día de diciembre tuve un sueño; todo estaba iluminado, y llegaron unos amigos míos y me despertaron, todos me miraban y me decían "M. ya está aquí, ha llegado" declaraban cuales apóstoles y yo les decía que quién era esa persona tan importante como para que ellos me despertaran "Pues ella, la mujer perfecta, la mujer de cada uno", yo les preguntaba que como era para ser perfecta para todos, y ellos dijeron que ella tenía la apariencia que cada uno quería para él, a sus ojos. Y efectivamente se me acercó en sueños, rodeada de una aureola (todo esto apesta a descenso de la Virgen), una luz intensa que la cubría hasta que estuvo suficientemente cerca de mí y sí, la ví, me habló, me acarició y después se fue, y si.

Era ella. Joder si lo era.